Contratos de renting tecnológicos o comprar equipos, ¿qué es mejor?

Si tienes una empresa, muy probablemente necesites equipos para trabajar: ordenadores, tablets o smartphones son esenciales en el día a día de cualquier negocio. Pero es posible que te preguntes ¿compro u opto por el renting de equipos informáticos? Para responder a esta pregunta hay que ir más allá de las consideraciones iniciales: el mantenimiento, las reducciones de impuestos o la flexibilidad de cada opción son factores a considerar para tomar una decisión.

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Monkey Business Images || Shutterstock

Optar por un contrato de leasing tecnológico puede tener muchas ventajas:

  • Es la opción más económica y segura si necesitas que tus equipos se actualicen con frecuencia, el leasing te permite cambiar de dispositivos sin tener que almacenar los viejos.
  • Un contrato de leasing te da garantías tanto de los equipos como de su mantenimiento. Si tienes problemas o averías, la empresa a la que has contratado el alquiler temporal de los equipos es la responsable.
  • Los pagos son mensuales por lo que puedes predecir lo que te vas a gastar en equipamiento. Siempre puedes disponer de una partida en tu presupuesto para el pago de los equipos.
  • La mayoría de empresas que se dedican al leasing de equipos informáticos son muy flexibles, y te permiten probar tecnologías y dispositivos que de otra forma no te atreverías a comprar.

Sin embargo no todo son ventajas, ya que por ejemplo a la larga el coste global es mayor que si adquirieras los dispositivos, además de que pagas una serie de intereses por el uso de los equipos.

Por otro lado, uno de los mayores inconvenientes de los contratos de leasing es que es posible que entre sus cláusulas o condiciones te obliguen a rentar los equipos durante un tiempo determinado que puede ser mayor al que tú necesitas. En ese caso no sólo el renting no te será rentable, sino que acabarás perdiendo fondos.

Comprar equipos informáticos es una inversión para muchas empresas y no siempre es barato, aunque tiene muchas ventajas como, por ejemplo, que al ser el propietario de los mismos puedes modificarlos como quieras y necesites o que puedes revenderlos si así lo requieres.

Además, la compra de equipos también tiene sus desventajas ya que el mantenimiento de los mismos depende de ti y cualquier avería correrá de tu bolsillo.

Tomes la decisión que tomes, ten estos y otros factores en consideración antes de decidirte por una de las opciones.

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